Las tuberías de PPR (copolímero aleatorio de polipropileno) son la primera opción para los sistemas modernos de agua potable. Valorados por su excepcional estabilidad térmica, son ideales para la distribución de agua fría y caliente. El proceso de soldadura por fusión crea uniones monolíticas sin costura que son más fuertes que la propia tubería, lo que elimina el riesgo de fugas. La superficie no tóxica y resistente a la corrosión del PPR garantiza un flujo de agua puro y una longevidad notable, lo que la convierte en una solución fiable y de bajo mantenimiento para cualquier proyecto.